Hoy solo sé que no valgo nada para nadie.
Aparte de mi familia... ¡simplemente nadie!
No sé porque es difícil aceptarlo.
Si es algo que ya había aceptado siempre.
Si a la larga a mí rara vez me importa alguien.
Y si en parte es algo tan normal, para este mundo tan egoísta...
Y aun así siento que es un momento difícil de asumir.
Es algo que me llega a cansar, que aburre...
Esta maldita rutina de no tener nadie especial por quien vivir.
Mientras vas observando a todos con sus supuestas vidas perfectas.
Los amigos que no existen.
Una farsa total, la amistad.
Algo inexistente y trivial.
Y el amor, ni hablar.
Las mujeres... ni para qué mencionar.
Si no saben diferenciar
Entre un poeta y un común vulgar.
La mujer.. ¿cuál belleza puede contemplar?
Si acaso la de las mentiras que tanto disfruta escuchar.
En una prisión de la cual no puedo escapar.
Dudando que a alguien yo le pueda importar.
Y si me fuera hoy para siempre.
Sé que pocos o nadie me extrañaría por quien soy...
Ese es el precio de ser mi mismo.
De no hacer parte de esta mediocre sociedad...
- Andreu.
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