Descender o no.
Ante la incertidumbre.
Hacia el abismo de no saber.
Finalmente decido lanzarme.
Y todo se ve Azul.
Y después de lanzarme he llegado a..
Ningún lugar, simplemente estoy herido.
Y sangrante.
Poco a poco, sangrando...
Hasta que logro zafarme.
Del dolor tan directo.
Y aún así sigo cortado.
Y Arde.
Quema.
Y espero.
A mi único amigo.
Y le aviso.
Y no escucha.
Y ahora también está herido.
Sangrando...
Y me despierto.
Era sólo un sueño.
He visto a una hermosa mujer.
Advirtiéndome que no puedo perder.
La oportunidad.
Su oportunidad, preferiría decir.
Y la veo un rato, y no la vuelvo a ver.
Me gustan sus ojos.
Y al tiempo me alejan de creer.
Sus mentiras, suenan tan dulces.
Sus labios suaves, muy seductores.
Su cabello rubio y ojos claros.
Su palidez me atrae.
Al igual es hora de irme.
Y despierto.
Y es un sueño.
Y soy conciente de ello!!!
En otro sueño.
Es tan extraño.
Jamás había sido tan claro.
Y siento una presencia cerca.
Mientras miro mi cuerpo.
En el espejo.
Está rojo, muy rojo.
Herido.
Y mientras me miro.
Sé que alguien me observa.
Y me arroja una chaqueta.
Negra.
Volteo y atisbo.
Nadie.
Siento un escalofrío.
Despierto... o no?
Intento hacerlo.
Me encuentro en ese limbo.
Entre lo real y lo onírico...
Y siento un leve toque.
Alguien me está tocando.
Algo.
Pero es imposible, ¡esto es casi el mundo real!
Aún así lo siento.
Despierto.
No hay nadie a mi alrededor.
Hasta donde sé duermo solo.
No hay nada.
No hay nadie.
No entiendo.
Un sueño dentro de un sueño.
Dentro de la mitad de otro sueño,
y de la realidad.
De miedo.
Terror.
Y ahora sí despierto.
Finalmente despierto.
Es domingo... hace frío...
Quisiera un abrazo.
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